Navarro negó presiones de AFARTE pero admitió “consultas” de Hellemeyer

El presidente de la Cámara de Comercio reconoció comunicaciones con el presidente de la organización que nuclea a las electrónicas vinculadas con el convenio colectivo, pero aseguró que “nunca hubo presión”, respecto del congelamiento de paritarias. Además, remarcó que los salarios de comercio están “muy lejos de los salarios de las fábricas”. Se mostró dispuesto a discutir con el gremio la recomposición salarial en paritarias, a partir de abril, y destacó el objetivo común con el sindicato, que es mantener los puestos de trabajo.

“Nosotros tenemos el convenio colectivo nacional 130, que es el convenio mercantil, al cual respetamos en todo su contenido. Por sobre ese convenio tenemos un acuerdo regional, y sobre eso mantenemos conversaciones con el CEC, y tenemos firmado acuerdos desde el año 2007”, recordó Navarro.

Río Grande.- Luego de las cartas remitidas por fábricas electrónicas a proveedores, intimando a aceptar el congelamiento de paritarias por dos años, a riesgo de ver cancelados sus contratos, se le consultó al presidente de la Cámara de Comercio, Diego Navarro, sobre posibles presiones de AFARTE para frenar un aumento en el rubro mercantil.

El secretario adjunto del Centro de Empleados de Comercio, Daniel Rivarola, había mencionado un llamado que recibió en forma personal, y también una comunicación del presidente de AFARTE, Federico Hellemeyer, con Diego Navarro, aunque sin dar detalles de su contenido.

“En algún momento puedo haber tenido conversaciones con el presidente de AFARTE para saber cómo es el convenio nuestro, pero nunca bajo presión”, aseguró Navarro a FM Del Pueblo.

“Nosotros somos representantes directos de nuestro convenio, en materia de lo que hemos firmado en el Ministerio de Trabajo de la Nación con la contraparte, que es el CEC; y somos independientes”, subrayó, aunque aclaró que “esto no significa que no estén consultando o preguntando cuáles son las relaciones que se mantienen dentro del convenio colectivo”, dijo de la asociación de industriales.

Sin rechazar explícitamente las pretensiones de AFARTE de extender el congelamiento a los empleados de sus proveedores, Navarro remarcó que “nuestros salarios están muy lejos de los salarios de las fábricas. No tenemos ningún punto de comparación”.

Un problema del país

Para el empresario el problema radica en “cuestiones de gobernabilidad”, y cargó contra la política de un gobierno que “de un día para otro le dice a la sociedad que van a usar las competencias que tienen los países vecinos, o los países europeos y asiáticos. Esas competencias juegan en contra cuando hay desequilibrios con el comercio interno y externo. Cuando entran menos divisas de las que se consumen, evidentemente tenemos un problema”, sostuvo.

“Esto se puede arreglar con más crédito, pero eso tiene un límite, porque si no hay flujo de fondos para poder pagar, se va a achicando la capacidad de crédito. También se empiezan a encarecer los créditos, porque el país es más riesgoso. Es lo que se está viviendo y cada vez estamos peor. A simple vista, uno ve que el déficit fiscal nos está llevando a una inflación difícil de controlar. El gobierno nacional quiere hacer cosas para bajar la inflación, pero el resultado es bastante limitado. De los países que nos circulan, Brasil tuvo en todo 2017 un 2,9% de inflación; Chile apenas superó el 2%. Estamos muy lejos”, planteó.

“Vamos peor porque seguimos cayendo, en calidad de vida, en calidad de puestos de trabajo, en competitividad. Si no somos competitivos como país, vamos a tener menos calidad de trabajo y puestos de trabajo con menos salarios. En los países que no son competitivos, el salario es una miseria”, observó, instando a la Nación a “corregir las variables para ser competitivos o vamos a empezar a tener problemas, que es el planteo que se viene haciendo”.

Dispuesto a las paritarias

Contra la postura de las empresas nucleadas en AFARTE de extender el congelamiento salarial a los rubros mercantil, de seguridad y gastronómicos, que son sus proveedores, desde la Cámara de Comercio adelantaron la decisión de abrir las paritarias.

“El convenio de 2017 vence en abril y, previamente a sentarnos a discutir la nueva paritaria, tenemos que esperar que se sienten a nivel nacional. Seguramente vamos a encontrar un punto de equilibrio con el CEC, como hacemos todos los años. Tratamos de ponernos de acuerdo porque es muy delicado para ambos sectores, y tenemos un solo objetivo, que es sostener los puestos de trabajo”, subrayó.

“El convenio mercantil abarca una gran cantidad de rubros, que son asimétricos y no tienen la misma posibilidad de actividad económica, porque va desde un quiosco a un supermercado. Con el CEC tratamos siempre de encontrar puntos de encuentro y seguramente algunos rubros pueden pagar un poco más, pero como nos manejamos dentro del mismo convenio, no podemos poner en juego los rubros que no tienen esa posibilidad”, explicó.

No desconoció la dependencia de la industria, a lo que se suma la caída en las ventas. “Evidentemente si se cae la actividad hay menos posibilidades de generar más pagos. Esperemos que la economía empiece a funcionar y la verdad estamos todos muy preocupados”, concluyó.