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El ministro de Finanzas Federico Zapata dio detalles sobre la operatoria de colocación de letras de tesorería y estimó que entre hoy y el lunes ingresarán los fondos a la provincia. Parte se destinará a la cancelación anticipada de la deuda histórica con la OSEF que, “no es la solución definitiva, pero la posiciona de otra forma para renegociar prestaciones”, dijo. El resto irá a cubrir desfasajes estacionales de caja y no está previsto realizar inversiones. El ministro adelantó que este año hará un nuevo intento para reestructurar la deuda contraída en la gestión Bertone, a fin de contar con mayor plazo de gracia y liquidez. Dio a conocer una importante reducción de déficit previsto en el presupuesto, de 20 mil a 13 mil millones de pesos, por aumento de la recaudación nacional y provincial.

Río Grande.- El ministro de Finanzas Públicas, Federico Zapata García, dio detalles por FM La Isla sobre la operatoria de colocación de letras por 3.600 millones de pesos, anunciada ayer. Explicó que estas letras de tesorería son “una herramienta financiera de corto plazo que no constituye endeudamiento, porque antes de finalizar el ejercicio se debe revertir la operación. Se busca suplir diferencias estacionales de caja, porque uno estima los recursos en el presupuesto, pero el ingreso no es siempre lineal. La primera mitad del año es cuando más gastos se efectúan, pero los recursos no ingresan de la misma forma y empieza a haber deuda con proveedores, por ejemplo. Por lo general se recauda menos a nivel nacional y provincial, y hay estacionalidad. Ahora el gobierno nacional va a cobrar el impuesto a las Ganancias y en mayo va a haber un pico de recaudación. Esta herramienta suple las diferencias entre gastos y recursos, sabiendo que la inflación hace que los gastos vayan creciendo y también los recursos. Si uno sabe que en el segundo semestre va a tener más recursos que en el primero, utiliza esta herramienta para hacerse de los fondos ahora y cancelar deudas con proveedores, que permite negociar compras futuras y acortar la cadena de pagos. Si estamos dentro de los 30 días de pago, esto permite comprar a mejor precio”, manifestó.

Calificó esta emisión como “exitosa e histórica”, al tiempo que aclaró que “no se le van a dar letras a los proveedores. Lo que se hizo fue colocar las letras en el mercado abierto de capitales y los inversores, bancos privados, y el fondo de garantía de sustentabilidad de ANSES son los que compraron las letras. Los fondos van a ingresar a la provincia y con ese dinero se van a pagar las deudas”.

“Se emitieron tres series, una a 30, otra a 60 y otra a 180 días. A los 30 días tenemos que pagar intereses y trataremos de renovar la letra, lo mismo con las otras series. Estamos previendo que entre hoy y el lunes van a ingresar los fondos. El proceso fue largo por las autorizaciones que tuvimos que ir sorteando. Pasamos por distintos filtros del Ministerio de Economía de la Nación y uno de los más importantes fue el Banco Central, que lo trata como deuda”, dijo.

Respecto de la tasa, indicó que “se toma una de referencia que hoy está en el 46% anual. A eso se le suma la tasa que ofrece la provincia, que es un 6 ó 7%, y vamos a estar en el orden del 53 ó 54% anual. Esto conlleva la primera emisión porque hay provincias que ya tienen una trayectoria en emisión de letras y se paga un poco menos de tasa. Al ser la primera teníamos que salir con una tasa atractiva”, explicó.

“Nosotros trabajamos con un colocador principal que es el Banco de Servicios y Transacciones, BST, y a su vez el BST contrató otros colocadores, como el Banco Patagonia, el Banco Tierra del Fuego que tomó letras por 200 millones, también participó Provincia Seguros, Provincia ART, algunos fondos de inversiones. Se articula con un colocador que a su vez subcontrata colocadores”, dijo.

Fondos para OSEF

La prioridad del destino de los fondos será la obra social estatal. “Es una decisión política cancelar anticipadamente el convenio que se había firmado en 2007, con un plazo de 15 años. La OSEF va a poder cancelar inmediatamente sus deudas con los prestadores y esto la posiciona de otra forma para renegociar prestaciones. No es la solución definitiva, pero va a ayudar un montón”, aseguró.

“A nivel general se va a destinar a deudas que tiene el Poder Ejecutivo central. Esto tiene que ver con transferencias que se hacen a organismos descentralizados, pero estamos dentro de los límites. No hay una deuda como la que tiene la obra social, que es producto de la baja de sus recursos. En la medida que los aumentos salariales en cuatro años no acompañaron la inflación, se generaron muchas deudas. Nosotros tratamos con la recuperación salarial de que no sea tan deficitaria la situación. No es una solución de fondo, pero permite resolver las deudas”, señaló.

Inversiones “no está previsto realizar” y el fin de esta emisión es “compensar diferencias entre recursos y gastos en esta parte del año”. Tampoco estos fondos van a ir a cancelar deudas de obra pública porque “todas las que se están ejecutando están respaldadas por los bonos. Los dólares están acreditados en la cuenta y se venden cuando hay que pagar certificados. En este sentido no hay ningún tipo de atraso. Hoy tenemos 75 millones de dólares aproximadamente”, estimó, recordando que buena parte se afectaron “durante el 2020 para el programa PROGRESO”.

Reintento de reestructuración

El ministro Zapata adelantó que “en lo que queda del año vamos a intentar la reestructuración de la deuda. Todas las provincias el año pasado pudieron reestructurar su deuda en moneda extranjera, no así Tierra del Fuego. Vamos a volver a hacer un intento y eso va a generar un impacto en las arcas provinciales porque las regalías que hoy se destinan a las cuotas son de libre disponibilidad. Entendemos que cancelando anticipadamente alguna parte se puede llegar a lograr un período de gracia mayor y eso hace que la provincia pague de otra forma”, dijo.

“Hoy en día las regalías son suficientes para pagar las cuotas y está quedando un excedente. Estamos justo a la mitad del plazo, porque se emitieron los bonos en 2017 y el vencimiento es en 2027. En época de pandemia la producción hidrocarburífera no estaba a pleno y se sintió la falta, e incluso hubo que poner plata del tesoro que se podía destinar a otra cosa”, recordó.

Impacto de la guerra

Consultado sobre el impacto del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania en las arcas provinciales, se centró en el aumento del precio del gas. “Nosotros somos una provincia que subsidia las garrafas de la gente que no está conectada a la red y eso hace que los prestadores suban el precio. Obviamente el subsidio es mayor, porque para este año teníamos presupuestados 3.600 millones para subsidio y estamos viendo que va a llegar a 5 mil millones. Es un impacto en toda la región por no tener producción propia y la escasez hace que suba la oferta y el precio”, dijo.

Acuerdo con el FMI

Por otra parte se le consultó sobre las reuniones que mantuvieron los gobernadores y las sospechas de una merma en el envío de recursos nacionales, por límites impuestos por el FMI luego del acuerdo. “Lo que afecta del acuerdo con el FMI es que la nación empieza a perder posibilidades de emitir moneda y eso termina repercutiendo en todas las provincias. Nosotros no estamos viendo un reflejo tan duro de que no esté ingresando dinero por el acuerdo con el fondo. La coparticipación va a acompañando la inflación de acuerdo a lo que teníamos previsto en el presupuesto y estos primeros meses no son la mejor medida, porque por lo general los recursos no son los mejores. Después de que se recauda el impuesto a las Ganancias hay un pico, luego se empieza a estabilizar, y por lo general en la segunda parte del año uno puede medir si los recursos disminuyen o no”, expuso.

Menos déficit

Finalmente dio a conocer una importante reducción del déficit provincial. “En el presupuesto planteamos un déficit de 20 mil millones y empezamos a ver que se va achicando. Hoy estamos alrededor de los 13 mil millones, por aumento de los recursos básicamente. Hay aumento de recursos tanto provinciales como nacionales y siempre las estimaciones las hacemos de una forma prudente, previendo que la inflación no va a ser tan alta y que la recaudación no va a tener un aumento tan grande. A medida que transcurre el año se va viendo que esto va aumentando, y en realidad los ingresos se registran cuando se dan y los gastos cuando se conocen, así que hay que tratar de prever en el presupuesto que los recursos no van a ser tan altos. Esto tiene un correlato con la inflación, pero también suponíamos que no iba a ser tan grande como la de este año”, advirtió.

“Lo que más termina perjudicando las arcas provinciales son los aumentos salariales que uno tiene que ir dando para acompañar la inflación. En marzo y abril hubo picos que no preveíamos, por eso se decidió dar este aumento del 6% a todos los escalafones y tratar de compensar esos aumentos”, agregó el ministro.

En cuanto a recaudación propia, “hay un repunte de la actividad pero todavía no se ve reflejado, porque la recaudación está por debajo de lo presupuestado. Entendemos que se debe a que la actividad todavía no está a pleno y también porque uno había planificado que la actividad iba a tener mayor impacto que el año pasado. Quizás está un poco lento el repunte, al momento de ver la recaudación de impuestos. Hay sectores que tributan la tasa de verificación de procesos productivos y no tienen un impacto directo en la recaudación de Ingresos Brutos”, concluyó.