El gerente de Tecnomyl en Tierra del Fuego, visitó nuestros estudios en donde brindó un repaso del desarrollo industrial en la provincia y también se refirió al régimen de promoción industrial de Manaos. Lamentó escuchar “lo mismo que se decía en los 90’ sobre la reconversión económica” y aseguró que competir con China “es imposible. Ni Estados Unidos puede competir”. Asimismo, expresó su preocupación por la avanzada de las importaciones que impactan negativamente en las empresas radicadas en la isla.
RÍO GRANDE. – El Ingeniero Enrique Schoua, Gerente de Planta de Tecnomyl, visitó los estudios de Radio Universidad (93.5) en donde se refirió a la actual situación industrial provincial como así también lo que sucede en el sector industrial en el ámbito nacional e internacional.
En diálogo con “Buscando el equilibrio”, brindó un repaso de cómo se fue desarrollando el sector industrial en Tierra del Fuego y cuáles fueron las primeras empresas en radicarse en la provincia más austral del mundo. “Yo había empezado en Ushuaia sin radicarme allí con la puesta en marcha de una planta de fabricación de televisores marca Panoramic en 1977. Esa empresa no llegó a realizar tv color nunca porque terminó cerrando antes por diversos motivos. En esa época no había líneas marítimas que llegaban hasta el puerto de Ushuaia. Los suministros llegaban vía marítima a Buenos Aires y de ahí eran trasladados vía terrestre a Tierra del Fuego. Como no teníamos y, actualmente tampoco, un cruce por aguas argentinas, había que pasar por un territorio extranjero que, de tanto en tanto, cerraba las fronteras”.
Continuando con el relato, indicó que “cuando llegué a Tierra del Fuego había más de 20 mil habitantes y sólo 4 fábricas aproximadamente. En el 82’ llegó Drean, Panasonic, Philco, Phillips, Sanyo, Noblex, Toshiba, etc. Entre 1982 y 1986, estaban todas las marcas. En ese momento hasta se interceptaban micros para ofrecerle trabajo a la gente. Incluso, en mi primera experiencia en Panoramic, la mitad de la dotación eran presos detenidos de comisaria que todas las mañanas salían en una combi con custodia hacia la planta y volvían a la comisaría donde estaban detenidos. En la planta desayunaban, almorzaban, merendaban y cenaban. Fue una gran experiencia sobre todo porque fue gente que se recuperó”.
“Hay gente que se bajaba del avión y automáticamente se quería volver a su lugar de origen. Había mucha nieve, frío y ninguna calle asfaltada. No era nada atractivo pero de pronto, cuando empezó TV Color, hubo un reinicio con mucho más ímpetu y más fuerza en Tierra del Fuego y se empezaron a instalar rápidamente casi todas las empresas que no pudieron sostenerse en el continente porque la apertura económica de aquel entonces que impulsaba el famoso Ministro de Economía Martínez de Hoz, implicaba importaciones fáciles con bajos aranceles lo que hizo que las empresas buscaran un camino para competir con esa importación del exterior”.
El Ing. Schoua recordó que a partir de 1991 “sucedió que hubo un decreto de necesidad de urgencia, derogando el régimen de promoción de la Ley 19.640. Duró poco tiempo porque acá hubo un rechazo muy fuerte. Pero en 1982, vencía por primera vez el régimen que había sido promulgado en 1972. A principios de diciembre del 1982, el Estado todavía no definía si iba a prorrogar o no el régimen. El resultado de la indefinición fue que el 3 de diciembre de 1982, una masiva movilización salió a las calles y se presentó un petitorio para la prórroga de la 19640 al intendente Juan Apollinaire. Después de 1992, si bien no se derogó, la Ley siguió pero quedó en letra muerta porque se bajaron los aranceles de importación muy fuertemente; se eliminaron los precios de referencia entonces pagaban aranceles muy bajos sobre una base imponible muy baja. Eso, sumado al contrabando generalizado porque la aduana paralela implicaba 10 kilómetros de contenedores por día que ingresaban al Puerto de Buenos Aires donde la importación no solo era de televisores. Esto generó el cierre de muchas empresas en la provincia”.
“En general se puede decir que las empresas argentinas dependerán del tipo de cambio del momento si son competitivas o no. En los 80’, un operario en China ganaba 30 dólares; ahora gana 300 dólares. En Brasil los sueldos están un poco más arriba pero en Tierra del Fuego, con cargas sociales, rondan los 3 mil dólares mensuales. Estamos casi diez veces arriba de lo que se paga de salario en China por lo tanto, ahí empezamos mal por el costo laboral”.
El gerente de Tecnomyl explicó que “China cada vez desarrolla más tecnología y tecnifica sus procesos productivos. El uso de inserción manual de componentes en placa hace que la calidad disminuya notablemente. Hoy por hoy todo el mundo está utilizando tecnología de promoción de punta. En lo que hace a competitividad, Tierra del Fuego produce en las plantas electrónicas tal cual se produce en cualquiera de los países del primer mundo. Estamos en las mismas condiciones y tenemos las mismas herramientas”.
En este sentido, afirmó que “toda la industria Argentina necesita alguna barrera de importación porque ni Estados Unidos puede competir con China. Actualmente China también está exportando agroquímicos a muy bajo precio porque hay superproducción y son productos que se utilizan en todo el mundo. Los agroquímicos son defensivos para la producción agropecuaria de todo el mundo”.
“Nosotros en Tierra del Fuego fungicidas, herbicidas e insecticidas. Actualmente sucede que había ciertos frenos como por ejemplo las licencias no automáticas que hacen que se le ponga la lupa a cada licencia de importación y eso frena un poco. En algunos casos no están más las licencias en automáticas entonces la importación entra más fluidamente”.
Paralelamente, el Ing. Schoua se refirió a la Ley de Promoción de Manaos, y recordó que “empezó en el año 67’ y tenían 42 mil habitantes. En poco tiempo llegó a 2 millones de habitantes. Lo que estamos viendo y sigue sucediendo es que Brasil en Manaos consolida cada el régimen cada vez más y asegura un horizonte claro y definido y es una ley igual que acá. La superintendencia de Manaos es un ente público privado mixto que no solo aprueba los proyectos sino que sale al mundo a buscar negocios para la región. En nuestro caso, hay mucha inestabilidad jurídica alrededor del régimen entonces sucede que en los 90’ cerraron todas las fábricas que cerraron y mientras tanto no se peleó. El gobernador de esa época decía que estábamos en la reconversión económica y que íbamos a vivir del turismo, de la pesca y de la planta de metanol que terminó de instalarse en Chile”.
“Hoy empiezo a escuchar lo mismo que los 90’ que hablaban de reconversión económica. El régimen no implica desembolsos del tesoro nacional para ponerlos en las arcas de las empresas. El régimen de promoción implica el no pago de impuestos pero hoy empiezo a escuchar lo mismo de los funcionarios nacionales. Hace poco cerró IFSA con 160 empleados y sólo 5 o 6 trabajadores se reinsertaron en otro trabajo”, lamentó.
Sin embargo, según confirmó Schoua, “el déficit fiscal empeoró porque el simple hecho de que las empresas funcionen acá hace que los trabajadores vayan a los supermercados y compren y generen ingresos brutos correspondientes a la fabricación del producto con la tasa que le corresponda. Eso le está faltando a la provincia. Ahora esas máquinas se importan con arancel cero. Tenían que bajar de precio y no bajaron”.
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