El menor permanece internado en Terapia Intensiva Pediátrica del Hospital Regional Río Grande luego de que el carrito en el que se encontraba se incendiara al tomar contacto con un calefactor. Presenta quemaduras en distintas partes del cuerpo, intoxicación por monóxido de carbono y compromiso de las vías aéreas. La Justicia ordenó la detención preventiva de sus padres mientras se investigan las circunstancias del hecho.
Río Grande.- Un bebé de apenas ocho meses se encuentra en estado crítico y bajo estricta observación médica en la Terapia Intensiva Pediátrica del Hospital Regional Río Grande, tras haber sufrido graves quemaduras en un incendio ocurrido en una vivienda de la Margen Sur de esta ciudad.
Según se informó oficialmente, el siniestro se habría originado cuando el carrito en el que se encontraba el menor tomó contacto con un calefactor encendido, lo que provocó que el fuego se propagara rápidamente. Como consecuencia, el niño sufrió quemaduras de consideración en ambas piernas y en parte del rostro, además de una importante intoxicación por monóxido de carbono.
Los profesionales de la salud indicaron que el bebé también presenta compromiso de las vías aéreas, por lo que debió ser asistido de urgencia y permanece con soporte médico especializado, en un cuadro que continúa siendo evaluado hora a hora.
A raíz del hecho, intervino la Justicia, que dispuso la detención preventiva de los padres del menor mientras avanzan las actuaciones judiciales. La medida fue adoptada con el objetivo de esclarecer las responsabilidades y determinar las circunstancias en las que se produjo el incendio, en el marco de una investigación que se encuentra en pleno desarrollo.
En el lugar trabajaron efectivos policiales y peritos especializados, quienes realizaron las primeras diligencias para establecer con precisión cómo se desencadenó el siniestro. Desde los organismos oficiales se remarcó la importancia de extremar las medidas de seguridad en los hogares, especialmente durante la temporada invernal, ante el uso de sistemas de calefacción y la presencia de niños pequeños.
La evolución del estado de salud del bebé continúa siendo seguida de cerca por el equipo médico del hospital, mientras la comunidad permanece conmocionada por la gravedad del episodio.

















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